Este incidente, está siendo investigando como un acto de terrorismo, y ha desencadenado un amplio despliegue de seguridad en una de las áreas más concurridas y turísticas de París, que ha incluido el confinamiento de cientos de turistas en el interior de Notre Dame, si bien la Policía ya ha confirmado que la situación está “controlada”.
El hecho ocurrido este martes, donde un hombre armado con un martillo, ha consegudio herir a un agente en la explanada que se extiende ante la catedral de Notre Damne, en pleno centro de la capital de Francia, antes de que otro agente le disparase.
La Prefectura de Policía ha detallado a través de su cuenta de Twitter de que un agente ha resultado herido y de que “El autor de los hechos ha sido neutralizado y trasladado a un hospital“, aunque no ha detallado el alcance de sus respectivas heridas.
La Fiscalía antiterrorista de París ha abierto inmediatamente una investigación sobre el ataque y ha encargado las pesquisas a la sección antiterrorista de la Brigada Criminal y a la Dirección General de la Seguridad Interior (DGSI).
Tras el ataque, y para descartar nuevas amenazas, las fuerzas de seguridad han establecido un amplio perímetro en torno a la explanada de Notre Dame y las calles aledañas. La Prefectura de Policía, además, ha pedido a la población que evitará el lugar debido a “Una intervención en curso“.
Como parte de ese despliegue, los servicios de seguridad han cerrado las puertas de la catedral de Notre Dame, donde unas 900 personas han quedado confinadas hasta nuevo aviso, mientras la Policía verificaba si entre ellos había algún cómplice del asaltante.
NV1/RTVE