El ex presidente Barack Obama se presentó el miércoles a una corte en el centro de Chicago para cumplir con el servicio de jurado.
El convoy del ex presidente, considerablemente más pequeño que el que tenía cuando vivía en la Casa Blanca, salió de su casa en el vecindario de Kenwood, en el South Side de la ciudad, y llegó al Centro Richard J. Daley, en el centro de Chicago, poco después de las 10 de la mañana. El Daley Center es la sede de varios tribunales y agencias del condado.
No se sabía si Obama sería escogido o no para servir como jurado. De serlo, probablemente sería presidente del jurado. Pero si es tratado como el resto de los convocados a este deber cívico, Obama tendrá que ver un video hecho hace décadas en el que el presentador de noticias Lester Holt – muy joven por entonces, cuando todavía era periodista local y no presentador nacional – explica las funciones y responsabilidades de los jurados.
Si es seleccionado, Obama recibirá la paga reglamentaria de 17,20 dólares diarios como jurado.
Obama es el ex funcionario público de más alto rango que es convocado al servicio de jurado en Chicago, y seguramente el único que ha llegado resguardado por el Servicio Secreto. Pero no es el primer ex presidente en ser convocado a este servicio. En el 2015, George W. Bush respondió a la convocatoria en Dallas, pero no fue escogido como jurado. Y en el 2003, el ex presidente Bill Clinton se presentó en una corte federal en la ciudad de Nueva York, pero tampoco fue escogido.
Obama tampoco es la primera personalidad famosa de Chicago en ser convocada a este deber cívico. En el 2004, Oprah Winfrey resultó escogida y fue parte de un jurado que halló culpable de asesinato a un hombre. Una década después, Lawrence Tureaud, mejor conocido como Mr. T, llegó a la corte de un suburbio de Chicago para cumplir con el servicio de jurado, con su usual corte Mohawk, pero sin las cadenas de oro por las que se le conoce. Pero pese a su aspecto menos llamativo, Mr. T no fue escogido como jurado.
NV1/AP